Rubén Lugilde Yepes, profesor de Educación Secundaria del CEO Miguel Delibes de Macotera, Salmanca, nos remite una reflexión más para compartir en este blog. Bajo el título genérico Pensando con los dedos, en esta ocasión reflexiona sobre la posible indigestión que pueden provocar las tabletas en el aula. 

Rubén, gracias por compartir.
Durante este curso curso nuestros alumnos de 4º de ESO tienen de nuevo las tabletas Samsung como continuación de la experiencia del curso pasado. Y estamos observando comportamientos un tanto sorprendentes.
Lo primero que nos sorprendió fue su resistencia inicial a continuar con el proyecto. «¿Tenemos que cogerlas obligatoriamente este curso?», fue lo primero que nos preguntaron. Tras dialogar con ellos, quedó claro que como «juguete» les encanta, pero el problema es… que con ellas les hacemos trabajar más. Vamos, que prefieren una clase en la que el profesor les largue un tema, aprenderlo de memoria y soltarlo en un examen (lo que María Acaso denomina «pedagogía búlímica» en su libro rEDUvolution), antes que indagar, elaborar, comunicar.
Así que nuestra primera tarea dentro del Proyecto DEDOS este curso fue… ¡convencer a los alumnos para que participasen! Un inicio poco alentador, la verdad sea dicha. Pero estos riesgos tiene la experimentación e innovación.
Esta situación nos llevó a replantear la manera de utilizar las tabletas en clase. Estaba claro que no debíamos hacer demasiado énfasis en su uso sistemático, así que en mi clase de Historia opté por enfocarlo como una herramienta más, dejándoles a ellos que escogieran cómo y cuándo utilizarla. Pero como a estas alturas uno ya no puede ni quiere prescindir de ciertos recursos, les planteé varios procedimientos de trabajo habituales en los cuales las tabletas son un aliado casi imprescindible:
  • Cuaderno digital: cada alumno comparte conmigo una carpeta en Google Drive, en la cual debe entregar todos los trabajos y utilizarla como repositorio de materiales. Además hay otras carpetas comunes y de grupos de trabajo, según les convenga.
  • Aula virtual: para ellos -como para nosotros- ya es lo normal en Secundaria, y han interactuado con Moodle en mis clases desde primero de la ESO.
  • Consulta de documentos: por supuesto nada de fotocopias. Cualquier pdf, mapa, fotografía, vídeo, etc., están disponibles sólo en el Aula Virtual. A veces las visualizamos en la PDI y otras veces las consultan ellos en casa o en clase.
  • Búsqueda de información: en esto creo que sobran las explicaciones. Siempre hay que recordarles que hay vida más allá de Wikipedia, pero eso es parte del aprendizaje.
  • Libros digitales. Sé que es un tema de apasionado debate, pero nosotros seguimos valorando positivamente las posibilidades que ofrece un buen libro de texto. Todos los alumnos tienen licencia digital, pero sistemáticamente prefieren utilizar su ejemplar impreso. Aunque les pese y abulte.
El segundo grupo de tareas que les he planteado a lo largo de este curso, y en las que el uso de la tableta puede resultarles de utilidad son las siguientes:
  • Líneas del tiempo: la información la buscan en diferentes recursos (libro, atlas histórico, internet), pero la elaboración prefieren realizarla en un ordenador personal con recursos 2.0, como por ejemplo Timerime (sobre todo porque está en español)
  • Audiochuleta: a pesar del nombre no les dejo usarla en el examen, claro, pero sí deben elaborar un audio con la síntesis del tema en menos de dos minutos, y compartir el resultado con los demás. La actividad es sencilla: redactar, grabar y compartir. Yo suelo utilizar RecForge, pero hay muchas también intuitivas y funcionales.
  • Organigramas: en esta actividad prefieren las aplicaciones de la tableta, como Mindjet.
  • Fococonceptos: se trata de presentar visualmente un concepto definido e ilustrado en una sola diapositiva. Para ello, como para otros trabajos de «presentaciones» han utilizado las opciones de Kingsoft Office en la tableta o Powerpoint en el ordenador. Algunos se han atrevido con Prezi, pero les resulta un poco más complicado y lo evitan.
  • Creación de vídeos: como resumen de un tema o creación de un anuncio de «propaganda ideológica» en el tema del Imperialismo, los alumnos han elaborado varios vídeos. Para la investigación y recopilación de la información han utilizado las tabletas, pero para la edición del vídeo el programa Moviemaker de su ordenador.
Así que, tras un primer ataque de indigestión, parece que la tableta forma parte del menú. Integración con moderación, parece ser la situación que, de momento, tenemos en este curso. A ver qué os puedo contar dentro de unas semanas.
Pero antes de terminar, también quiero destacar la tarea que han realizado dentro del «Premio Nordeste de Jóvenes Emprendedores». En esta convocatoria han participado tres equipos de nuestro curso, y uno de ellos, con el proyecto «Asociación jóvenes macoteranos«, ha sido seleccionado. El aprendizaje previo en el trabajo por proyectos, la aplicación de las TIC y el manejo de la tableta sin duda son una parte del éxito en esta empresa, aparte del talento y esfuerzo de nuestros alumnos, por supuesto.